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La asociación de inmobiliarias con patrimonio en alquiler (ASIPA) estima que en los próximos 10 o 15 años serán necesarias 1,5 millones de viviendas en alquiler.

La aspiración de tener una vivienda en propiedad está cambiando en España. Cada vez son más los jóvenes que optan por el alquiler a la hora de emanciparse y buscar su primera vivienda. La inseguridad laboral y la dificultad para ahorrar de cara a poder pagar un mínimo de un 20% de entrada a la hora de comprar y financiar una vivienda les lleva a la decisión de vivir de alquiler.

Por otra parte, los millenials suelen preferir destinar una mayor parte de sus ingresos a otras actividades y no al ahorro en viviendas. Los viajes, el ocio y todo lo relacionado con internet y las comunicaciones ha ganado peso en el gasto de esta generación.

Inversores responsables

Frente a esta tendencia general en los jóvenes de ahorrar poco, existen también los inversores responsables. Estos se toman en serio su futuro y no sueñan que papá estado les garantice unos ingresos el día de su jubilación. Estos jóvenes buscan opciones de ahorro seguras y rentables para su dinero.

El pequeño ahorrador se encuentra hoy en día con dificultades para encontrar productos interesantes fuera del mercado inmobiliario. La bolsa y los fondos son una montaña rusa de emociones sólo aptas para brokers agresivos adictos a la adrenalina.

Aquí surge la compra de viviendas destinadas al alquiler. Una tendencia al alza entre jóvenes profesionales financieramente responsables que une la oferta y la demanda.

El ahorrador encuentra una forma cómoda y responsable de inversión con alta rentabilidad y seguridad.

La persona que busca una vivienda verá satisfecha su necesidad al encontrar viviendas a precios accesibles y con una buena gestión tanto en el proceso de búsqueda como en el de mantenimiento.